Barry Beyerstein: Hemos perdido a uno de los mejores

Submitted by traducidio on

(reimpreso de The Trebach Report)

[inline:beyerstein.jpg align=right caption="el Prof. Barry Lane Beyerstein"]Cuando digo uno de los mejores, lo digo letra por letra. Barry, que acabó de fallecer con la edad joven de 60 años, fue un académico espléndido, profesor, activista social y ser humano. Él era sabio, compasivo y bondadoso con todos con quienes se encontraba. En todos los años que lo conocí - casi mitad de su vida -, no logro acordarme de ninguna acción de su parte que no fuera dulce y solidaria y muy, muy sabia.

Mis pésames a su esposa, Susie, y a sus hijos, su hija Lindsay y su hijo Loren. Gracias a Ethan Nadelmann y Kevin Zeese por contarme esta noticia triste, pero importante.

He aquí mis reflexiones, algo serpenteantes, pero así me siento esta mañana – así y traumatizado y un poco enojado con los caprichos a veces crueles del destino.

Ha sido fácil seguir el progreso de Lindsay porque ella se ha vuelto una de la nueva generación de expertos en Internet o blogueros afiliados a Google, creo. ¿Por qué me acuerdo de esos años pasados, cuando una Lindsay mucho más joven intrigó a un académico que venía de Francia a hacer una visita porque el francés que ella aprendió en la escuela y en el cual era fluyente – era, bueno, clásico y un francés moderno raramente lo escuchaba? Barry y Susie se reían contenidamente mientras me contaban esa historia. Estoy seguro que no la he contado bien y espero que sea corregida pronto.

Conocí a él y su esposa Susie cuando participaban de uno de mis seminarios comparativos sobre las políticas de drogas en Londres en la Facultad Imperial. Esto debe haber sucedido a principios de los años 1980 o fines de los años 1970. Mi memoria no es de las mejores, pero me recuerdo muy bien que Bruce Alexander también estaba en el seminario. De todos modos, logro acordarme que en la asistencia estaban grandes profesionales canadienses y que nos quedamos todos en alojamientos estudiantiles en la Imperial en el corazón de Londres, o cerca del corazón. Fue una buena época y mantuvimos el contacto desde entonces. Para entonces estoy seguro que había completado mi primera monografía sobre políticas de drogas, “The Heroin Solution”. Cubría la historia comparativa del control de las drogas en los EE.UU. y el Reino Unido – y, por supuesto, la historia de la heroína. Pronto pasé a trabajar en el próximo, que trataba de la situación entonces corriente en los EE.UU., con un poquito de información comparativa sobre el Canadá y también, claro, acerca de Gran Bretaña. Quería llamarlo “The War on Us” [La guerra contra nosotros]. El epígrafe sería “Hemos conocido al Enemigo y somos Nosotros”. Estoy seguro que a Barry le gustó esa idea. Mi editor me convenció a intitularlo The Great Drug War. Aun hoy día, particularmente a mí no me gusta ese título. Lo que importa aquí es que podía contar con la reacción de Barry y también de Bruce a todos los giros en mi investigación y con su lectura de todo el manuscrito. ¡Qué dedicación y qué tremenda ayuda! Cité mucho a Barry en una nota a pie de página importante en ese libro.

Barry y Bruce fueron bien útiles cuando traté después del proceso de armar la Drug Policy Foundation, con la ayuda próxima constante de Kevin y mi esposa, Marjy. Tanto Barry como Bruce estaban en la Junta Consultiva y proporcionaran consejos maravillosos.

Mi familia consideraba la familia de Barry y Susie una extensión de la nuestra, aunque no nos mantuviésemos constantemente en contacto. Cuando nuestro hijo del medio, Paul, se casó con Joanne Hughes en Seattle, Barry y Susie estaban en la asistencia.

Los intereses de Barry iban mucho más allá de las políticas de drogas y más recientemente él estuvo muy involucrado en la arena escéptica/paranormal. Este campo va más allá de mi conocimiento y no puedo conversar sensatamente sobre ello. Sin embargo, anexaré enlaces a otros comentarios sobre él y planeo escribir más sobre él en el futuro próximo. También haré correcciones cuando alguien envíe informaciones que contradigan mi memoria incierta.

Al terminar esta memoria divagadora recuerdo una nota que Steve Jobs mandó en el sentido de que todos nos vamos a morir y que mientras estamos por aquí es mejor que vivamos nuestras vidas para que hagamos lo que está más próximo a nuestros corazones y nuestras almas y nuestro sentido de ética personal. Todo eso – y sin miedo, diría yo. De la vida o de la muerte. También diría que Barry hizo precisamente eso, todito.

Arnold Trebach

Permission to Reprint: This content is licensed under a modified Creative Commons Attribution license. Content of a purely educational nature in Drug War Chronicle appear courtesy of DRCNet Foundation, unless otherwise noted.

Add new comment


Source URL: https://stopthedrugwar.org/cronica/2007/jul/17/barry_beyerstein_hemos_perdido_u