Por votación el Parlamento alemán ha decidido autorizar la prescripción de heroína a los adictos que no hayan reaccionado a otros tratamientos. La cámara baja del Parlamento aprobó la medida el 28 de mayo.

Según la nueva ley, los usuarios de heroína que hayan estado consumiéndola durante por lo menos cinco años, tengan 23 o más años de edad o no hayan cesado el tratamiento en otros programas podrán recibir heroína de calidad farmacéutica en centros de tratamiento designados. La ley sigue un programa piloto alemán llevado a cabo en siete ciudades entre el 2002 y el 2006 que mostraba resultados impresionantes en la reducción de la delincuencia, de las bajas por sobredosis y del VIH entre los consumidores inveterados.

Se han informado resultados parecidos en Gran Bretaña, Canadá, Holanda, España y Suiza. El año pasado los votantes suizos legalizaron la heroína recetada en un referendo público.

La noticia fue aclamada por reformadores de las políticas de drogas de todo el planeta. “El éxito de los proyectos alemanes de prescripción de heroína, juntamente con resultados parecidos en otros países, deja pocas dudas de que la prescripción de heroína puede reducir la delincuencia, el VIH y las muertes por sobredosis en Estados Unidos también”, dijo Ethan Nadelmann, director ejecutivo de Drug Policy Alliance. “Además, la votación [del 28 de mayo] en Alemania, juntamente con pruebas parecidas de respaldo público en otros países, muestra que la opinión pública será a favor aun de políticas de drogas polémicas cuando éstas reciban la oportunidad de comprobar su validez. Es incuestionable que los programas de prescripción de heroína son necesarios hace mucho en EE. UU. Todo lo que estorba es la política y la suposición retrógrada de que ello jamás podrá suceder en Estados Unidos”.

Asimismo, el grupo australiano Families and Friends for Drug Law Reform utilizó la votación en Alemania para agitar en pro de políticas similares Allá Abajo. “La decisión alemana reta a Australia a anular el veto de John Howard de este tratamiento medicinal y poner la humanidad y el bienestar social en primer lugar”, dijo Brian McConnell, presidente de Families and Friends for Drug Law Reform. “Se debe revisar el veto de la decisión de los ministros de Salud australianos en 1997 a favor de un ensayo con heroína a la luz del número cada vez más grande de muertes por sobredosis y la amenaza de un nuevo aluvión de heroína afgana”, dijo.

“Los pretextos para no introducirlo han quedado sin fundamentos dadas las evidencias abrumadoras que ahora existen en defensa de las medidas”, agregó McConnell. “Atraer a los adictos graves al tratamiento y alejarlos del reclutamiento y de la venta a nuevos usuarios para sustentar su vicio seguramente disiparán las inquietudes de los padres y los gobiernos respecto a la administración de este tratamiento. Puede socavar los beneficios que el crimen organizado saca de la heroína, lo que es crucial en una época en que aumenta la producción mundial de heroína. Hay mucho que ganar con esta medida de buen sentido: hay vidas que salvar, la salud de los individuos que mejorar y un enorme potencial de reducción de la delincuencia y del tráfico en heroína ilegal”.