Los vecinos de Cristianía, un enclave contracultural de 900 personas que se ha estado autogestionando desde que los jipis se hicieron cargo de una base militar abandonada en el centro de Copenhague en 1971, han hecho una petición a los tribunales daneses en un intento de recobrar el control sobre su comunidad. El gobierno nacional conservador tomó medidas enérgicas contra las ventas de drogas en la famosa Calle de los Camellos del enclave en 2004 y después anunció planes de jipificar el distrito.

[inline:christiania-entrance.jpg align=left caption="la entrada a Cristianía en Copenhague (por cortesía de Wikimedia)"]Los vecinos de Cristianía han contraatacado. Cuando el gobierno anunció en 2004 que iba a tomar medidas de fuerza, los traficantes de cannabis quemaron sus propias tiendas en la Calle de los Camellos y se retiraron hacia los cafés y departamentos en una tentativa de embotar el esfuerzo. Ellos demandaron al gobierno danés en 2006 por el derecho a utilizar el terreno aun que no fueran sus dueños.

Desde entonces, han ocurrido varios choques entre los residentes y la policía, incluso peleas callejeras que dejaron un saldo de dos policías heridos y 15 personas arrestadas hace dos semanas. Esa batalla sucedió cuando la policía intentó desalojar a los ocupantes. Dispararon gas lacrimógeno contra los manifestantes, quienes contestaron incendiando las barricadas policíacas y tirando piedras y cocteles molotov contra la policía.

“El plan del gobierno destruiría la Cristianía que conocemos”, le dijo Thomas Ertman, vocero de los vecinos de Cristianía, a la Associated Press el lunes.

El caso será visto por el Tribunal Superior Oriental y una vista está programada para el 21 de noviembre. Se espera una decisión en enero.