En la Ciudad de Nueva York, la policía arrestó a más de 39.700 personas por cargos relacionados con la marihuana el año pasado y eso no es por casualidad. En la última década, más o menos 400.000 neoyorkinos han sido presos por llevar pequeñas cantidades de marihuana, siendo la gran mayoría negra o morena.

[inline:nyc_marijuana_arrests.gif align=left]Los datos vienen de un informe recién lanzado por el sociólogo Harry Levine de Queens College y Deborah Small, directora ejecutiva de Breaking the Chains. De acuerdo con el informe, "Marijuana Arrest Crusade", los blancos constituían apenas 15% de los arrestados, mientras que los hispanos eran 31% y los negros componían más de la mitad de todas las detenciones por marihuana con 52%.

“El perfilamiento racial es inevitable en las calles de la Ciudad de Nueva York”, dijo Donna Lieberman, directora ejecutiva de la New York Civil Liberties Union, durante una rueda de prensa en la sede del grupo en Manhattan.

Nueva York está entre el pequeño número de estados que despenalizó la tenencia de marihuana a fines de los años 1970, pero eso no ha impedido a la policía arrestar a las personas que llevan pequeñas cantidades de hierba y luego someterlas a permanencias de 24 horas en las cárceles de la Ciudad de Nueva York mientras aguardan la lectura de los cargos. La policía sortea la ley de despenalización al “inventar” arrestos por “tenencia a la vista de todos”, dijo Levine. La policía detiene rutinariamente a jóvenes negros y morenos en las calles, los fuerza a vaciar sus bolsillos, entonces los acusa del delito más grave de “tenencia a la vista de todos”.

Desde que las prisiones por marihuana de la Gran Manzana empezaron a ponerse por las nubes durante la gestión del alcalde Rudolf Giuliani, a veces la ciudad ha respondido por uno en cada 10 arrestos por marihuana en todos los EE.UU. El año pasado, ese dato fue más bajo, siendo que Nueva York respondió de casi 5% de las detenciones por marihuana en todo el país, lo que aún es una cifra enorme.

Eso transforma a la Ciudad de Nueva York en “la capital mundial de arrestos por marihuana”, dijo Lieberman.