Policial: Las historias de policías corruptos de esta semana

Un policía de Wyoming es sentenciado por robar la droga de entrenamiento de su padre adiestrador de perros policías, un fiscal en Indiana está en una situación difícil por la incautación de activos y otro agente penitenciario va preso. Vamos a ello:

En Tallahassee, Florida, el lunes por la noche arrestaron a un agente penitenciario por presuntamente vender cocaína en una prisión de la región norte de Florida. Acusan al guardia Keith Alan Black de la Secretaría de Administración Penitenciaria de Florida de un cargo de tráfico de cocaína. Lo arrestaron después de una investigación que empezó el 24 de septiembre y quedó detenido en la Cárcel de la Comarca de Leon con fianza estipulada en $150,000.

En Lyman, Wyoming, el 1º de octubre un ex policía de Gillette y agente penitenciario de la Comarca de Campbell fue sentenciado a dos a cuatro años de prisión por robar marihuana del coche patrulla de su padre. Thomas Brent Clark se agarró cerca de 450 gramos de marihuana que su padre, un adiestrador de perros policías de la Jefatura de Policía de la Comarca de Uinta, guardaba en su vehículo para fines de entrenamiento. La semana pasada lo condenaron a la misma duración de pena de prisión en la Comarca de Campbell, pero en realidad puede no cumplir pena entre rejas. El juez que lo condenó ha recomendado que lo manden a un campamento militar por seis meses en lugar de una penitenciaría estatal.

En la Comarca de Delaware, Indiana, abusos en la confiscación de activos de parte de fiscales municipales siguen molestando a los tribunales de la zona. Jueces de juzgados de circuito han estado revisando casos antiguos y critican especialmente al fiscal Mark McKinney, quien un juez llamó “embustero” en su trato con el tribunal respecto a las confiscaciones por delitos de drogas. Los jueces también reprocharon a McKinney por aplicar acuerdos confidenciales a reos para obtener bienes sin pasar por los tribunales y un juez examina casos pasados de confiscación en su corte tras saber que la cuenta bancaria de un reo que él había mandado congelar había sido vaciada. Eso hace parte de un patrón en McKinney, quien en este caso dividió los haberes de la cuenta bancaria entre el Destacamento Antidroga de Muncie Delaware, el reo y su abogado defensor. Ahora McKinney debe presentar un escrito que explique por qué no debería ser responsabilizado por distribuir los fondos impropiamente.